Hace unos meses cuando cumplí 40 años, mi mujer me regaló un cupón válido por una semana de entrenamiento personal en un buen gimnasio de Barcelona.
Independientemente de que no soy un deportista, pensé que era una buena idea para intentar detener ese proceso de "barriguita" que a todos nos ataca.
Llamé al Gym e hice mi reserva con una "personal trainner" llamada Nadia, quien se auto describió como instructora de aeróbic de 27 años y modelo de trajes de baño y ropa deportiva.
Me recomendó que llevara un diario para ir escribiendo mi progreso.
Te lo envío:
LUNES: Empecé mi día a las 6 de la mañana. Bastante difícil levantarse de la cama a esa hora pero todo cambió cuando llegué al gimnasio y vi que Nadia estaba esperándome. Parecía una diosa griega: rubia, ojos celestes, y una gran sonrisa, con unos labios carnosos y espectaculares. Nadia me hizo un tour por el local y me mostró los aparatos y me tomó elpulso después de 5 minutos en la bicicleta fija.
Se alarmó de que mi pulso estuviera acelerado, pero yo lo atribuí a ella, vestida con su malla de lycra ajustada tan cerca de mí. Disfruté bastante viéndola dar su clase de aeróbic, después de terminar mi fabuloso primer día de ejercicio.
Nadia me estaba motivando cuando hacía yo mis flexiones, a pesar de que ya me dolía la barriga de tanto meterla para adentro cada vez que Nadia pasaba junto a mí.
MARTES: Me tomé dos jarras de café, pero finalmente logré salír de la puerta de mi casa.
Nadia hizo que me recostara boca-arriba, me puso a levantar una pesada barra de metal y después se atrevió a ponerle ¡¡pesas!!.
Mis piernas estaban ya débiles por la cinta, pero logré completar ¡ UN KILÓMETRO COMPLETOOO!
La aprobadora sonrisa de Nadia y el guiño cómplice que me hizo suponía que todo valía la pena....¡me sentía
fantástico!... era una nueva vida para mí.
MIÉRCOLES: La única forma que conseguí de lavarme los dientes, fue poniendo el cepillo sobre el lavabo y moviendo la cabeza a ambos lados encima de él.. . Creo que tengo una hernia en los pectorales, conducir no fue tan fácil, sólo al frenar y dar vueltas al volante me dolía hasta el pelo, aparqué encima
de una moto...
Nadia se estaba impacientando conmigo por considerar que mis gritos molestaban a los demás socios del gimnasio. Su voz resulta un poco aguda a esas horas de la mañana y cuando grita se vuelve nasal y es muy molesta.
Me duelen las pelotas cuando me subo a la cinta, así que Nadia me subió a la escaladora. ¿para qué puñetas alguien inventó una máquina para hacer algo que quedó obsoleto desde que existen los ascensores?
Nadia me dijo que me ayudaría a ponerme en forma y a disfrutar la vida....otra de sus tantas memeces y promesas.
JUEVES: Nadia me está esperando con sus jodidos dientes de vampiro y con su sonrisa estilo Jack Nicholson en Batman. No pude evitar llegar media hora tarde: fue el tiempo que me llevó ponerme los zapatos.
La sádica de Nadia me puso a trabajar en las argollas pero, cuando se distrajo, salí corriendo a esconderme en el baño. Mandó a otro entrenador a buscarme y como castigo, me puso a trabajar en la maquina de remar y...... me hundí.
VIERNES: Odio a la hija de puta de Nadia más que a cualquier otro ser humano que hubiere podido odiar en mi vida.
Estúpida, famélica, anémica, pendeja, mucha fachada sin cerebro. Si hubiese alguna parte de mi cuerpo que pudiese mover sin un dolor desesperante , le partía la boca de un mamporro.
Nadia quiso que trabajara en mis triceps....¡YO NO TENGO TRICEPS....!
Y si no quiere que le rompa el suelo, que no me dé las putas pesas o cualquier otra cosa que pese más que un sándwich...
La bicicleta fija me hizo desmayar y desperté en la cama de una nutricionísta, una flaca y fea que me dio una lección magistral sobre alimentación sana, y claro, la tía no tiene la más puta idea de lo que es morirse de hambre.
A mí lo que me gusta es comer mariscos, asados, buen vino etc.
SABADO: La cabrona de Nadia me dejó un mensaje en mi contestador con su vocecita de tortillera preguntando porque no fui hoy.
Sólo con escucharla me dio ganas de cargarme a patadas el contestador, pero no tenía la fuerza suficiente ni para levantarlo, incluso ni para levantar el mando a distancia de la tele, así que me tumbé en el sofá 11 horas seguidas viendo el maldito National Geographic....un pajarito brincando de rama en rama.
DOMINGO: Llamé un taxi para ir a Misa y agradecerle a Dios que esta semana haya terminado.
También recé porque el año que viene, mi mujer me regale algo un poco más divertido, como una
endodoncia, tres by-'pass, o un análisis de próstata...
8 comentarios:
Oskar, qué buen rato me has hecho pasar. He recordado tiempos en los que me apunté a n gimnasio y acabé como este pobre. No volví a matricularme nunca en ningún otro gym...
MEG: jajajaja que bueno, me paso lo mismo, me apunte y los primeros dias no podia ni peinarme.
...historias de cada día. Que bueno¡ lo has calcado, cuant@s empiezan y cuant@s...terminan¡ Saludos.
Muy bueno el post. Acabas de demostrar que de la admiración al odio se puede pasar en menos de una semana.
Ya te dije que me ví reflejada en este post.
Pásate por mi blog que tienes un premio esperándote. Ya sabes, de los que vamos pasando unos a otros, y que me apetece pasarte a ti por los buenos ratos que me haces pasar. UN BESO Y FELIZ FINDE.
ANRAFERA: Es asi todos quieren estar guapos, pero sin esfuerzo
INTERNET: Amor y odio en un abrir y cerrar de ojos
MEG: Voy pa ya volando
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